¿Qué diferencia hay entre el platino y el oro blanco? Descúbrelo aquí
¿Qué diferencia hay entre el platino y el oro blanco? Descúbrelo aquí
Si estás buscando una joya de alta calidad, probablemente te hayas encontrado con dos opciones muy populares: El platino y el oro blanco. En este artículo te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre estas dos joyas, para que puedas tomar una decisión informada.
¿Qué es el platino?
El platino es un metal raro, blanco-grisáceo, brillante y muy resistente. Es uno de los metales más densos y pesados del mundo, y por lo tanto, tiene una sustancial sensación de "peso". Es altamente valorado en la joyería de alta calidad debido a su belleza, durabilidad y rareza.
Una de las características más impresionantes del platino es su resistencia a la corrosión y al desgaste. Mientras que otros metales comunes se corroen o decoloran con el tiempo, el platino mantiene su brillo y lustre durante décadas.
Como resultado de todo esto, el platino es también uno de los metales más caros que se usan en la fabricación de joyas. Por lo tanto, si estás buscando algo raro y duradero, este es el material perfecto para ti.
¿Qué es el oro blanco?
El oro blanco, por otro lado, es una aleación de oro puro con otros metales, como el paladio o el níquel. Estos metales lo hacen más duro y resistente que el oro puro, y también le dan su característico color plateado. Aunque en apariencia es similar al platino, su proceso de fabricación es completamente diferente.
El oro blanco es muy popular en la joyería moderna debido a su aspecto elegante, así como a su precio, que es considerablemente más bajo que el del platino.
¿Cuáles son las diferencias entre el platino y el oro blanco?
La principal diferencia entre el platino y el oro blanco es la durabilidad. Mientras que el platino es más duro y resistente a los elementos, el oro blanco es un poco más suave y se desgasta antes. Además, el platino es resistente a la oxidación y la corrosión, mientras que el oro blanco no.
Otra diferencia importante es el precio. El platino es un metal muy valioso debido a su rareza y durabilidad, por lo que su precio es mucho más alto que el del oro blanco. Si estás dentro de un presupuesto, el oro blanco es una buena alternativa.
Si bien el platino es blanco brillante de forma natural, el oro blanco se fabrica con una capa de rodio para darle un brillo adicional. Con el tiempo, esta capa puede desgastarse, y es posible que necesites repetir el proceso de revestimiento. Esto no es un problema con el platino, que siempre mantendrá su brillo natural.
Por último, el uso de estos metales en la joyería afectará el peso y la apariencia de la pieza. El platino es un metal más pesado y denso que el oro blanco, lo que le da una sensación aún más lujosa. Sin embargo, el oro blanco es un metal más flexible, lo que significa que se puede trabajar de muchas maneras diferentes que el platino.
¿Qué debo elegir?
La respuesta a esta pregunta depende de tus necesidades y preferencias. Si estás buscando una joya que dure toda la vida y deslumbre, el platino es la mejor opción. Su precio elevado es justificado por su durabilidad y belleza.
Por otro lado, si quieres una joya elegante que no sea demasiado cara, el oro blanco puede ser una alternativa más asequible. Aunque hay que tener en cuenta que con el tiempo puede que necesites darle mantenimiento para mantener el brillo.
Conclusión
Tanto el platino como el oro blanco son excelentes opciones para la joyería de alta calidad. Mientras que el platino es más duradero y resistente, el oro blanco es más asequible. Sin embargo, la elección final depende de tus necesidades y preferencias.
Ya sea que decidas optar por el platino o el oro blanco, debes elegir una joya que te haga sentir hermoso y especial. Después de todo, la joyería es una inversión en ti mismo y en tu estilo de vida.
